Se publican tantos millones de fotografías al día que necesitan que las fotografías ocupen el menor espacio posible. Por este motivo, es importante entregarle a Instagram la fotografía con un tamaño last para evitar la compresión salvaje, que provoca pérdida de nitidez y calidad. Instagram tiene una interfaz en la que las fotografías se ven muy pequeñas.
Deja de tenerle tanto miedo a aumentar la sensibilidad ISO por si sale algo de ruido en tus fotos. Muchas veces nos gusta agregar un pie de foto a nuestras imágenes para explicarle al espectador qué está viendo y situarlo en un contexto concreto. Lo cierto es que en múltiples ocasiones ese texto ayuda y da valor añadido a la foto pero en otras, es totalmente prescindible. Ir a una tienda y comprar una cámara profesional no te convierte automáticamente en fotógrafo, ni conseguir más de mil likes en Instagram tampoco. Desecha esas concepts, da igual que tu presupuesto sea altísimo o que tengas más de 30mil seguidores. De igual modo que comprar un lienzo y un pincel no te convierte en pintor, debes respetar esta profesión y no auto proclamarte un experto desde el principio.
Resumiendo, ¿el fotógrafo ha sido capaz de controlar una serie de aspectos técnicos y juicios estéticos para crear lo que la mayoría de la gente considera que es una imagen “aceptable”? Los fabricantes de cámaras crean aparatos que hacen que todos estos juicios puedan llevarse a cabo correctamente de una forma sencilla y presentan opciones automáticas para todo, salvo para la composición de la imagen. Hacen lo que está en su mano para ayudarnos a crear una imagen “perfecta”, pero ¿esas fotografías son imágenes profesionales? La fotografía profesional no se basa simplemente en la creación de “imágenes perfectas” o en el control de las técnicas y los procesos técnicos. Aunque este no sea un manual sobre cómo tomar mejores fotos, es importante comprender las reglas básicas de la fotografía para asegurarnos de que somos capaces de controlar la creación de nuestras imágenes.